Emprendedores hoy, prosperidad mañana

Es importante construir un entorno propicio para que los emprendedores multipliquen su impacto.
Todos soñamos con una Colombia más próspera, equitativa y llena de oportunidades para las nuevas generaciones. Pero los sueños, por sí solos, no construyen país. Hace falta acción, visión, determinación, una buena dosis de resiliencia y, sobre todo, personas capaces de convertir desafíos en oportunidades. Y si alguien encarna ese espíritu, son los emprendedores.
Ellos apuestan todo por el futuro. No tienen horarios ni manuales, pero sí talento para soñar en grande y crear soluciones innovadoras para afrontar los retos del país. Con una determinación feroz, transforman industrias, dinamizan la economía y generan empleos, ingresos y oportunidades que benefician a millones de familias colombianas. Pero su mayor legado es inspirar a otros a seguir sus pasos. En Endeavor llamamos a esto el ‘Efecto multiplicador’ en su máxima expresión.
Estudios recientes revelan que más del 60 % de los emprendedores en Colombia han creado más de una compañía. No es coincidencia. Cuando un emprendedor crece, no solo reinvierte en nuevos proyectos, también abre puertas, ya sea como mentor, inversionista o demostrando que sí se puede.
Un caso emblemático de este fenómeno en nuestra región es Mercado Libre (Meli), empresa Endeavor. Meli ha revolucionado el comercio digital en América Latina e impulsado el crecimiento de miles de pymes. Al cierre del tercer trimestre de 2024, reportó ingresos netos de $ 5.3000 millones y una plantilla total de 76.000 empleados. Además, a través de Mercado Pago, ha facilitado la inclusión financiera de millones de personas no bancarizadas, demostrando que la innovación transforma industrias y mejora vidas.
"No podemos seguir viendo cómo nuestros emprendedores llevan su talento a otros países por falta de condiciones para crecer"
En Colombia, el Efecto multiplicador también es tangible. Siigo, la empresa de software contable en la nube, ha fortalecido más de un millón de mipymes en la región, destinando el 20 % de sus ingresos a innovación. A través de su fundación, ha cambiado la vida de más de 5.000 jóvenes de estratos 1 y 2.
No subestimemos la importancia de construir un entorno propicio para que los emprendedores sigan multiplicando su impacto. Para lograrlo, Colombia debe ofrecer condiciones adecuadas: un terreno fértil para la innovación, acceso a inversión, financiación y oportunidades para escalar. Según el informe de Lavca 2024, Colombia fue el tercer destino de mayor inversión en startups en América Latina, captando el 15 % del capital de riesgo, a pesar de la incertidumbre global, evidenciando nuestro potencial como semillero de empresas innovadoras.
Pero la historia demuestra que la inestabilidad económica y regulatoria frena el desarrollo. Entre 2002 y 2023, Argentina perdió hasta el 50 % de su PIB en fuga de capitales por la incertidumbre cambiaria y fiscal (Instituto de Economía Uade). Es claro que, sin confianza en el entorno financiero, el capital migra a mercados más estables. En Chile, los ajustes regulatorios en el sector renovable han generado incertidumbre, afectando la inversión y el financiamiento de nuevos proyectos.
Colombia no puede permitirse caer en esa espiral. No podemos seguir viendo cómo nuestros emprendedores llevan su talento a otros países por falta de condiciones para crecer. Cada emprendimiento que cierra es una oportunidad perdida. Sin un ecosistema sólido, perdemos innovación, empleo y progreso, y con ello, la posibilidad de generar ese Efecto multiplicador a largo plazo.
Si queremos que nuestros emprendedores transformen el futuro, debemos darles las condiciones para crecer hoy. Antes de conquistar mercados globales, necesitan poder competir aquí, en su propio país. Apostar por el emprendimiento es apostar por un país más próspero, innovador, competitivo y equitativo. Porque cuando un emprendedor despega, Colombia despega con él.